El club de lectura y los pequeños bibliotecarios
En nuestra biblioteca ocurren a diario cosas maravillosas. Esta semana comenzó a funcionar el Club de Lectura, que surgió como una respuesta a la inquietud de los alumnos. Durante un periodo, manifestaron que les costaba acceder a lecturas que fueran de su interés.
El Club de lectura convoca a chicos y chicas de todos los grados a leer y a escuchar literatura en general –las definiciones de géneros o autores están en manos de la bibliotecaria y las aprueba el equipo directivo–. La idea es incorporen la lectura como un hábito que se proyecte fuera de lo escolar.
La biblioteca de nuestra escuela tiene una vasta cantidad de historias a las que se puede acceder a través de lecturas dirigidas. Para disfrutar de estas instancias, hay que entrenar la escucha activa y paciente, prestar atención y concretar el encuentro o puesta en común entre todos los participantes.
En las jornadas del club, cada uno de los miembros puede elegir si prefiere leer en voz alta para los demás, o simplemente escuchar. La bibliotecaria acompaña cada lectura, cuidando el terreno de las interpretaciones para construir en cada texto una aproximación colectiva. Los títulos de los libros leídos se compartirán en una planilla pública.
En la kitá de 1er grado aprendieron acerca de las funciones de un bibliotecario, entendiendo cuáles son las responsabilidades de ese trabajo, entre las cuales está la de prestar libros a los socios. Para terminar la actividad cada uno diseñó su propio carnet de socios que será utilizado para canjear libros en la biblioteca de la kitá. Continuamos incentivando en nuestros alumnos el contacto con la literatura para formar estudiantes con pensamiento crítico, creatividad e imaginación.