Segundo grado y los pueblos originarios
Segundo grado estudió al pueblo Guaycurú y al conjunto de pobladores que formaba parte de este gran grupo originario de nuestro territorio. “Se les propuso reconocer las actividades que hacían estos pueblos ancestrales como comunidades nómades. Por ejemplo, la recolección de frutos, las guerras, cómo eran sus viviendas, sus desplazamientos”, explicó la morá.
En grupos de tres o cuatro alumnos, los alumnos/as jerarquizaron información a partir de pequeños recortes. Leyeron el material y extrajeron las ideas y los datos más importantes. Pero todo no acaba allí. Los chicos plasmaron su investigación en palabras, ideas sueltas o dibujos, para después contar al resto de sus compañeros. “Armaron cartulinas, afiches y expusieron todo lo que aprendieron, siguiendo las pautas que marcaban las actividades particulares de cada grupo”, contó la morá.
Luego los alumnos contaron en primera persona su experiencia: “Estudié los desplazamientos de los guaycurúes y pudimos contar a qué se dedicaban. Los hombres cazaban y ordenaban todo para la marcha. Las mujeres armaban y desarmaban las casas, además de cuidar a los bebés. Cuando se acababa la comida, se iban a buscar otros lugares con pesca. Le pongo un 10 a estudiar así”, dijo Bruno.
“Las mujeres cocinaban y tejían. Eran las encargadas de fabricar las redes para la pesca. La recolección también era trabajo de las mujeres y para hacerlo salían con grandes bolsas”, destacó Bianca.
“Los hombres cazaban con trampas, arcos y flechas. Hacían trampas con árboles. Después se comían la carne y a la piel la usaban para hacer casas o vestimentas”, Vicky.
“Nosotros hicimos arcos y flechas porque estudiamos las guerras”, contaron entre todos, y además expresaron que si bien se sintieron atraídos por vivir en esa realidad, prefieren la actualidad para vivir. “Preferimos Netflix, teléfono, computadoras”, corearon divertidos.