Los talmidim de primer grado ya tienen sus nombres
En el Midrash Tanjuma Vaiakhel 35:1 está escrito:
Tres nombres tiene el hombre.
El uno, el que le dan su padre y su madre.
El otro, el que le dan los hombres.
El tercero, el que se hace a sí mismo. Este último es el más valioso.
Nuestra escuela primaria realizó una ceremonia para que los alumnos de primer grado reciban su nombre en hebreo. Para aquellos que no lo tienen, resulta la posibilidad de elegir un nombre en el idioma de nuestro pueblo, y para aquellos que lo recibieron en su momento, la oportunidad de recuperarlo y socializarlo.
Nos cuenta la morá Nati Sucari, directora de la escuela primaria: “Es el tercer año consecutivo que, por decisión institucional, llevamos a cabo esta ceremonia, a la que denominamos HASHEM SHELÍ (Mi Nombre).
Con antelación a la ceremonia, cada familia completa una ficha en la que consigna el nombre hebreo elegido para su hija/o, explicando el porqué de esa elección. De esta manera, aspiramos a que ese nombre tenga un sentido a través de su significado, y que se utilice durante toda su escolaridad en el área judaica”.
La muy emotiva ceremonia se llevó a cabo en el Beit Midrash Ierushalaim de nuestra escuela, con la presencia de los niños, sus padres y demás familiares, las morot del grado, la Directora de la primaria y la Directora general y nuestro rabino Marcelo Polakoff. A continuación, los alumnos “inauguraron” el uso de su nombre hebreo participando, junto a todos los presentes de otra ancestral y no menos importante ceremonia de nuestro pueblo: el Cabalat Shabat.
Felicitaciones a los niños de primer grado y a sus familias recordando - como dice el Midrash- que, más allá del nombre que nos pusieron nuestros padres o el que nos designan nuestros semejantes, el nombre que cada uno se “hace a sí mismo” es el más valioso.