En nuestra Escuela, la enseñanza de Lengua y Literatura se organiza teniendo en cuenta que el lenguaje es una matriz constitutiva de la identidad individual y social así como también una actividad humana, mediadora de todas las demás. Por lo tanto, nuestros alumnos aprenden a través de la participación en diversas experiencias de oralidad, lectura y escritura situadas, con sentido y con propósitos reales, estimulando las actitudes y valores inherentes a dichas prácticas. 

 

Nuestro objetivo, es consolidar en la escuela y en cada aula una comunidad donde circule la palabra y donde la cultura escrita sea lo que forma parte de la vida  de la escuela y, en este sentido, se proponen diversas situaciones y actividades de complejidad progresiva así como también materiales lingüísticos que permiten asegurar los avances y enriquecimientos en los aprendizajes.

 

La literatura  pone al alumno en contacto con la dimensión estético-expresiva  y creativa del lenguaje, por lo tanto, ofrecemos a los niños la posibilidad de frecuentar los libros abriendo la puerta al pensamiento crítico y creativo y, con él, a la disposición a hacer preguntas y cuestionar lo establecido que se percibe como inalterable. La lectura, por su parte, permite que los estudiantes puedan imaginar, conocer y construir otros mundos y hacerse partícipes de la cultura, teniendo  en sus manos la posibilidad de construir nuevos horizontes.  (Gobierno de Córdoba, SPIyCE,  2010, p.6).